En un pueblo desconocido vivía una niña llamada Clara. Era una niña un poco tímida, divertida y le encantaba explorar. Ella jugaba todas las tardes con sus amigos. Un día jugaban al escondite y Clara se escondió en el porche de una casa vieja, que parecía que se iba a desmoronar de un momento a otro. Esperó y esperó, pero nadie salía a buscarla. Entonces se apoyó en la puerta de la casa y esta se abrió. Dentro de la casa vio que era muy vieja y polvorienta. Tenía de todo un salón , una cocina, un comedor, . . . Y, una cosa que le extrañó mucho, era una especie de patio centra que en la puerta tenía una ruleta dividida en cuatro partes y en cada una de ellas una estación del año. Una flecha se3ñalaba el invierno y, de repente se asustó ¡En pleno verano, dentro del jardín, estaba nevando ! No se lo podía creer. Una anciana entró en la casa y le dijo.
- No puedes estar aquí, pero, ahora que ya sabes mi secreto no te puedo dejar marchar.
Clara de momento se puso a llorar. La anciana, que se llamaba Soledad le preparó una habitación igualita a la de Clara de su casa. Se quedó con Soledad durante tres años. Clara notó que nadie la echaba de menos y cuando gritaba a la gente, pidiendo ayuda, desde la ventana de su cuarto, nadie la oía. Hasta que ya estaba harta de esa vida y encerró a la anciana en el jardín en invierno y ella se fue congelando poco a poco hasta que murió de frío. Clara salió de las casa y enseguida uno de sus amigos gritó . . .
-¡¡¡ Por Clara !!!
Ella se sorprendió y le dijo:
- ¿ Me recuerdas ?
- Pues claro llevo contigo en el colegio toda mi vida, ¿ a qué viene esa pregunta ?
- Por nada, por nada. Dijo muy extrañada.
Ella pensaba todas las noches antes de dormir en Soledad y qué le abría pasado.
lunes, 24 de marzo de 2014
miércoles, 19 de marzo de 2014
Una loca idea
Seguro que habréis visto en la tele un episodio tipo de que hay que hacer un proyecto de tirar un huevo y de que no se rompa, se ponen en parejas, uno que saca buenas notas y uno que saca notas pésimas, y al final el listo no lo logra y el vago gana. Bueno pues esta entrada tiene una historia parecida.
Antiguamente en Egipto los romanos querían invadirlo todo, y uno de los sitios era Egipto. La reina Cleopatra mandó a todo el pueblo que intentasen huir a otro sitio, pero el único camino era por el Nilo. Todos los habiatntes intentaron pasar pero a la mayoría se los comieron las pirañas y cocodrilos. Todo el mundo estaba aterrorizado, ya se oía a los soldados. Se preguntaban unos a otros que qué podían hacer, y de repente una niña apareció de entre la multitud de gente y dijo que podían pasar el río con una catapulta. Todos se reían de ella y decían que era una tontería, . . . Ella respondió que no podía pasar nadando porque se los comería y que no daría tiempo a hacer un barco para pasar. Los ministros y los soldados estuvieron pensando, mientras la jovencita construía una catapulta. Llegaron los soldados y todos estaban aterrorizados, hasta que vieron a una niña al otro lado del río. Los habitantes del pueblo se dieron cuenta de su erro y empezaron a catapultarse a su salvación. Todos la apreciaron desde ese día y Cleopatra la mandó ser primer ministro
En esta historia podreís comprobar que una idea absurdar puede salvar algo importante.
Antiguamente en Egipto los romanos querían invadirlo todo, y uno de los sitios era Egipto. La reina Cleopatra mandó a todo el pueblo que intentasen huir a otro sitio, pero el único camino era por el Nilo. Todos los habiatntes intentaron pasar pero a la mayoría se los comieron las pirañas y cocodrilos. Todo el mundo estaba aterrorizado, ya se oía a los soldados. Se preguntaban unos a otros que qué podían hacer, y de repente una niña apareció de entre la multitud de gente y dijo que podían pasar el río con una catapulta. Todos se reían de ella y decían que era una tontería, . . . Ella respondió que no podía pasar nadando porque se los comería y que no daría tiempo a hacer un barco para pasar. Los ministros y los soldados estuvieron pensando, mientras la jovencita construía una catapulta. Llegaron los soldados y todos estaban aterrorizados, hasta que vieron a una niña al otro lado del río. Los habitantes del pueblo se dieron cuenta de su erro y empezaron a catapultarse a su salvación. Todos la apreciaron desde ese día y Cleopatra la mandó ser primer ministro
En esta historia podreís comprobar que una idea absurdar puede salvar algo importante.
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